Homenaje a Herbert Wood
Herbert Wood with my grandmother, Elizabeth Moorhouse,
around or about 1918
Este es un homenaje a Herbert Wood
escribir sobre él, sé que debiera
mi abuelo por parte de mi madre
que murió diecinueve días antes de que ella naciera.
En 1918, una compañía ferroviaria envió a Herbert
Como jefe de estación a Prince Rupert
cuando Herbert salió de Montreal a los veintinueve
estaba sano, vigoroso y perfectamente bien
Por esta época, en Europa, la Gran Guerra estaba llegando a su fin.
un sangriento conflicto que mató a unos veinte millones
Los soldados de EE. UU. y Canadá comenzaron a regresar a casa.
portando un virus mortal y propagándolo.
Con la gripe española, según se dice,
cincuenta a cien millones murieron antes de derrotarla
empezó en una base del ejército de Kansas
se necesitaron años para que hubiera un respiro
******
Con la guerra, el gobierno canadiense vio una oportunidad
para obtener mayor control sobre su política exterior
por eso respondió favorablemente a una solicitud británica
para enviar una fuerza expedicionaria al este de Rusia
Donde en ese momento hubo una guerra civil
entre los blancos y los rojos, opuestos al núcleo
preparados para luchar
hasta que la victoria estuviera a la vista
La fuerza expedicionaria canadiense zarpó de Prince Rupert
A donde llegó por ferrocarril, siendo Herbert el jefe de estación
Ese era el puerto canadiense más cercano al este de Rusia
y probablemente fue por eso por lo que la vida de Herbert terminó.
Los canadienses regresaron a casa unos seis meses después.
muy agotados, no por la guerra, sino por enfermedades mucho peores
el que contagió a mi abuelo entre ellos, tal vez sí, tal vez no.
Fue una maniobra inútil, sin embargo.
Un siglo después pienso en el abuelo
que nunca conocí, el padre de mi madre
cuya temprana desaparición marcó su tiempo
y tal vez de alguna manera, el mío.
En 1957, después de que la URSS ingresara al Espacio
decidí darle a Rusia un lugar especial en mi vida
sintiendo de alguna manera que el idioma sería mi estrella
aunque durante muchos años el país me quedara lejos.
Me pregunto si ese encuentro entre mi abuelo
y el soldado canadiense con Rusia como destino
que pudo haber causado su muerte
no plantó en mí, una semilla
que dio forma a mi trayectoria.
Ojalá hubiera conocido a mi abuelo
cuyas hijas y su madre
me dieron profundo cariño y sabio amor
Herbert, pienso en esto, de lo que fuiste una gran parte. -
Siento que me estás escuchando
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